Los libros son como las personas, sólo valen por lo que llevan adentro.
Los libros que hablan del mar te salpican con agua.
Los que cuentan la vida de las abejas pegotean tus dedos de miel.
Si un libro no tiene estampas, léelo lentamente y entrégate a él; verás cómo tu mente le inventa jardines.
Con el tiempo te acostumbrarás a ser tu propio ilustrador y no necesitarás más que las letras oscuras.
Los humildes libros de papel guardan tesoros.
El que sabe leer es rico y poderoso.
Busca la compañía de los libros bellos y no serás defraudado.
Con un libro en tu mano, no habrá fronteras que te detengan ni sueños que no puedas alcanzar.
Publicado por M. Bibliotecaria Lucía M. Natalino - T. Mañana
Los libros que hablan del mar te salpican con agua.
Los que cuentan la vida de las abejas pegotean tus dedos de miel.
Si un libro no tiene estampas, léelo lentamente y entrégate a él; verás cómo tu mente le inventa jardines.
Con el tiempo te acostumbrarás a ser tu propio ilustrador y no necesitarás más que las letras oscuras.
Los humildes libros de papel guardan tesoros.
El que sabe leer es rico y poderoso.
Busca la compañía de los libros bellos y no serás defraudado.
Con un libro en tu mano, no habrá fronteras que te detengan ni sueños que no puedas alcanzar.
Publicado por M. Bibliotecaria Lucía M. Natalino - T. Mañana
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